Muchos economistas reconocen que los bienes y servicios privados ordinarios tienen que «pasar la prueba del mercado» – generar ingresos superiores a los gastos – para demostrar que los beneficios de los consumidores (revelados por la disposición a pagar) superan los desembolsos de los productores. Pero hacen una excepción cuando se trata de instrumentos monetarios […]