“Natura non faccio saluto” —“La naturaleza nunca salta”. Ese era el eslogan que el gran economista victoriano Alfred Marshall eligió para el frontispicio de su obra Principios de economía. Hasta hace poco, “La Fed nunca salta” podría haber sido el eslogan de nuestro banco central. Con raras excepciones, cuando elevó sus tasas de interés, lo hizo con pasitos de bebé […]