Una Nueva Amenaza hacia la Libertad Financiera en Argentina

El pasado domingo primero de octubre de 2023 se llevó a cabo el primero de dos debates sobre los aspirantes a la presidencia de Argentina. Durante la sección de economía, uno de los candidatos hizo un comentario que muchos pasaron por alto, pero es uno de los riesgos más fuertes para la libertad económica y financiera de los ciudadanos en nuestro país. Concretamente, mencionó que si los argentinos deciden darle su apoyo el 10 de diciembre, iría por la creación de una moneda estatal digital, conocida en inglés como CBDC.

Una de las grandes hazañas de las personas después de 2010 fue la adopción generalizada de criptomonedas o bitcoin para defenderse de la estafa conocida como la «inflación». Es por eso que desde el Decreto 297/2022, publicado el 6 de junio del 2022 en el Boletín Oficial y emitido por Alberto Fernández, donde otorga a la Casa de la Moneda la autoridad para validar y certificar digitalmente la moneda peso digital, hasta su presentación pública por parte del candidato a presidente Sergio Massa durante el debate del día Domingo 1/10/2023, es importante entender qué es un CBDC y los nuevos peligros a los que nos enfrentamos.

En palabras muy simples, una CBDC es la evolución criptográfica de una moneda fiat, como el peso, el dólar o el yuan, emitida por la autoridad monetaria nacional. Pero, ¿por qué representa un nuevo peligro para la libertad financiera y económica de las personas?

Una de las cualidades y particularidades de las criptomonedas o el bitcoin es la descentralización con la que cuentan, ya sea desde el momento de la emisión o porque no pasa por manos de banqueros centrales. Con una moneda emitida desde el banco central, volveríamos otra vez a una nueva falsificación, tal como se hizo en 1935 con la primera gran estafa al bolsillo de los argentinos al cambiar el oro por billetes emitidos. Desde entonces, hemos perdido 5 signos monetarios; le quitamos trece ceros a la moneda y podríamos quitarle otros tres.

Además, la creación de este tipo de token estatal puede tener grandes consecuencias sobre la privacidad y la vida de cada ciudadano. Algunos ejemplos son los casos de Venezuela o China.

Venezuela

El Petro, la criptomoneda estatal venezolana respaldada por petróleo y oro, está al borde de su liquidación definitiva. Su blockchain muestra irregularidades desde mayo y la plataforma asociada, #PetroApp, presenta fallas. Este experimento financiero, impulsado por el Gobierno de Maduro, se ve afectado por la corrupción entrelazada con altos funcionarios de PDVSA. La falta de descentralización, poca credibilidad y su limitada utilidad debido a la dolarización de la economía han contribuido al fracaso del Petro. En última instancia, se convirtió en una herramienta para desviar fondos en un contexto de sanciones internacionales y corrupción política. La decadencia del Petro envía un mensaje negativo a la comunidad nacional e internacional, resaltando los riesgos asociados a este tipo de medidas gubernamentales. Además, la experiencia del Petro sirve como advertencia de los peligros que conlleva la implementación de una moneda estatal digital, revelando las vulnerabilidades y riesgos inherentes a la centralización gubernamental en el ámbito financiero.

China

En el caso chino gracias a la implementación de las CBDC el régimen ha creado un sistema de «crédito social» que clasifica a sus ciudadanos según su comportamiento, castigándolos con restricciones como velocidades de Internet limitadas y prohibiciones de vuelo si el Partido Comunista los considera poco confiables. Este sistema penaliza acciones como mala conducción, compra excesiva de videojuegos y publicación de noticias falsas. Por ejemplo, comprar demasiados videojuegos, fumar en zonas para no fumadores o publicar noticias falsas en línea pueden disminuir el puntaje. Estas puntuaciones tienen un impacto real en la vida diaria de las personas, llegando a afectar la posibilidad de acceder a trabajos, viviendas o incluso la educación superior. Además, las empresas también están sujetas a evaluación y posible castigo por infracciones, como fraude financiero.

Este sistema ha sido criticado por su parecido a una gobernanza distópica. La brutalidad de este sistema es evidente en las penalizaciones graves que impone. Las personas pueden ser prohibidas de volar, restringidas en sus opciones de transporte y alojamiento, y excluidas de oportunidades laborales y educativas, todo basado en un puntaje social. La implementación de este sistema plantea serias preocupaciones sobre la libertad y privacidad de los individuos, reflejando una vigilancia y control gubernamental intrusivo en la vida cotidiana de los ciudadanos.

En Conclusión:

Tal como señalaba Hayek, «tardamos 200 años en darnos cuenta del error y horror de atar la religión al poder político. No esperemos otros 200 años para percatarnos del error y horror de atar el dinero al aparato estatal. Permítanme agregar lo siguiente: no solo en Argentina no hemos comprendido aún el problema que implica tener un banco central, sino que ahora le sumamos un nuevo problema: la creación de una moneda estatal digital.

*  Jeremías Rucci es Project Manager de la Fundación Internacional Bases. Actualmente estudia Derecho en la Universidad Nacional de La Plata. Es también SFL Alumni, y Co-compilador del libro homenaje de 65 autores: «Al Maestro Dr. Alberto Benegas Lynch (h)».

Fuente: Fundación Internacional Bases

Las opiniones expresadas en artículos publicados en www.fundacionbases.org no son necesariamente las de la Fundación Internacional Bases

Videos Nuevos

YouTube video
YouTube video
YouTube video
Fundación Bases
  • Fundación Internacional Bases
    Rosario - Madrid - Viena - Chicago
    Varsovia - Tel Aviv - Asunción - Lubbock
  • bases@fundacionbases.org | www.fundacionbases.org